
Existen muchas creencias sobre los faciales que pueden generar dudas sobre su efectividad. Aclaramos algunos de los mitos y verdades más comunes.
Mito 1: «Los faciales causan brotes de acné»
Realidad: Algunos tratamientos pueden provocar una «purga» inicial al eliminar toxinas y abrir los poros, pero esto es temporal y parte del proceso de limpieza profunda.
Mito 2: «Los faciales solo son necesarios si tienes problemas de piel»
Realidad: Cualquier tipo de piel se beneficia de un facial, ya que ayudan a hidratar, limpiar y prevenir signos de envejecimiento.
Mito 3: «Un facial puede reemplazar tu rutina de cuidado diario»
Realidad: Un facial potencia los resultados de tu rutina, pero no la sustituye. Es importante seguir un mantenimiento adecuado en casa.
Conclusión
Los faciales no son un lujo, sino una parte esencial del autocuidado. Conocer la verdad detrás de los mitos te permite aprovechar sus beneficios con confianza y mantener una piel sana y radiante.
Bibliografía:
- Cleveland Clinic. (2022). Facial Treatments: What to Expect.
- Healthline. (2023). Facial myths and facts.